Dado que las plantas y los espacios abiertos van siempre unidas de la mano, si te lo puedes permitir, uno de los elementos que no puede faltar en una terraza con estilo son sin duda las plantas. Y por supuesto naturales, aunque hay fabricantes que las hacen con tanto realismo que cuesta muchas veces identificarlas. Todos sabemos que las naturales requieren de cuidados específicos, pero merece la pena intentarlo.

Las plantas dan muchísima vida y generan una sensación mucho más agradable. Y cuando hablamos de plantas, por supuesto lo hacemos también de flores. Alguna que otra repartida por el espacio consigue aportar notas de color y alegría. En mi caso los macetones con hortensias (y además azules), son mi debilidad.

Aportan intimidad. Las plantas siempre son bienvenidas en los espacios de exterior, y según donde las coloques pueden favorecer la intimidad, haciendo de pantallas acústicas y/o evitando miradas indiscretas. Estarás de acuerdo conmigo en que sentirse a gusto en el espacio exterior pasa por mantener la privacidad. Usa entonces las plantas para crear una barrera visual.

Plantas sí, pero adaptadas al espacio

Ya sea sobre el suelo, colgando del techo, en jardineras, macetas… cualquier rincón es bueno para lucirlas. Si la cuestión es ganar intimidad y sin agobiar el espacio, puedes rodear el perímetro de plantas altas y además disfrutar de su frescor. Si precisamente lo que escasea es el espacio, lo mejor para decorar la terraza con plantas es aprovechar las paredes, con soluciones modulares que abarcan de suelo a techo.

Las plantas son además un elemento clave para darle color a tu terraza o balcón. Escoge flores y macetas de exterior para que duren el mayor tiempo posible. En este sentido, conviene escoger variedades autóctonas y adecuadas a la zona, orientación y climatología de la terraza. Las buganvillas, que me encantan, lamentablemente no se dan en cualquier sitio.

Si te preocupan los cuidados o no es precisamente lo tuyo, las plantas aromáticas, como el romero o la lavanda también son muy fáciles de cuidar y de paso servirán de ambientador natural.

En una terraza, por sencilla o pequeña que sea, con plantas y una adecuada iluminación ambiental, conseguirás un verdadero oasis. Anímate, y reserva parte de tu gran terraza para tener un jardín.

La iluminación que necesitas para crear ambiente o zonas de sombra

Si la iluminación es uno de los aspectos clave en cualquier estancia de la casa, cuando se trata de terrazas no podría ser menos. Yo particularmente prefiero el uso luces indirectas. Me encanta el aspecto teatral que crea la iluminación proyectada hacia los árboles, las paredes, o las velas colocadas en lugares estratégicos. Hacen los espacios únicos y acogedores. Aportarán estilo y una atmósfera cálida adecuada para una cena tranquila, o para el descanso.

Los farolillos, de madera, cerámica o acero, acogen velas en su interior para ofrecer una iluminación sutil.

Aunque no solemos utilizarlas mucho, las guirnaldas de luces son siempre una buena idea por el ambiente tranquilo que crean, que nos recuerdan a las verbenas de verano o a los patios sicilianos. Las tiras led, entre las que prefiero pequeñas luces colocadas sin ninguna geometría, son cada vez más asequibles, pero asegúrate de su color cálido para no llevarte sorpresas.

También las lámparas solares pueden solucionar necesidades específicas de puntos de luz, y lo mejor de todo es que no precisan instalación con cables, por lo que podrás ponerlas donde quieras. Desde modelos de sobremesa a suelo, balizas, apliques o colgantes. El funcionamiento es bien sencillo: almacenan energía por el día y se disfruta por la noche.

Además de la iluminación funcional, añade velas, luminarias portátiles (una de las tendencias decorativas de esta temporada) o lámparas de sobremesa o de pie que has cogido prestadas del interior de tu casa. Ya las devolverás a su sitio. Mi recomendación final para aportar iluminación: luz por supuesto, pero siempre cálida y puntual.

El exceso de luz también puede ser un problema, y más aún cuando es el sol el que con sus rayos nos está “atacando” a ciertas horas del día. Los grandes aliados de las terrazas y jardines en viviendas unifamiliares son los toldos y las pérgolas, y por supuesto en los pisos, ya sean terrazas o balcones. Por regla general, ningún espacio abierto puede disfrutarse sin tener algo de sombra. Los que tengáis áticos lo sabéis perfectamente: para aprovecharlos bien es indispensable hacerse con algún elemento que aporte sombra a tu terraza.

Para crear sombras hoy en día existen multitud de soluciones: un toldo, un techado a modo de pérgola a la pared con cañizo, una pérgola con cuatro puntos de apoyo y toldo, con velas textiles o parasoles articulados, cubiertas vegetales… Hay mil alternativas para ayudarte. Elige la que mejor se adapte a tu terraza. Y a tu presupuesto, claro.

Sea cual fuere la solución escogida, siempre deberás tener en cuenta el estilo del mobiliario y los colores de las tapicerías para elegirlo. Si necesitas un consejo nos encantará asesorarte. Puedes ponernos a prueba con nuestros servicios de asesoramiento por horas.

¿Cuál es la fórmula preferida por mí? Sin duda las velas triangulares, blancas o de colores muy claros. Me encanta la navegación a vela, y es una forma de acercarme al mar. Cierto es que para un toldo como este necesitaremos varios puntos de anclaje. Pero si los tenemos, ¡Es una magnífica opción!